GESTIÓN DE LAS EMOCIONES

En esta sociedad, en general, se nos enseña desde pequeños a bloquear las emociones. También más adelante, muchas veces preferimos evadirnos de la realidad antes que enfrentarnos a lo que realmente nos toca vivir (tristeza, enfado, frustración…)

Si evitamos constantemente experimentarlas, corremos el riesgo de bloquearlas en alguna zona del cuerpo, donde, con el tiempo, pueden aparecer síntomas (dolor o distintas patologías).

Para empezar a gestionar correctamente las emociones, remarcaremos….

NO EXISTEN EMOCIONES POSITIVAS Y NEGATIVAS, TODAS TIENEN SU FINALIDAD

Por ejemplo, tener miedo (que puede ser una emoción considerada como negativa) nos ayuda a ser cautos: si tienes que saltar un barranco y tienes miedo, esto le sirve al cuerpo para dejarte paralizado y salvarte de despeñarte o puede hacerte saltar muy alto para poder vencer este obstáculo. Es decir, esto es un recurso del organismo para protegerlo o bien reaccionar en consecuencia (aumentar la frecuencia cardíaca y respiratoria, preparar músculos, etc…)

De esta manera, cualquier emoción, incluso las consideradas “negativas”,  es útil para el organismo. Lo “patológico” es quedarse bloqueado en una emoción sin poder salir de ella durante mucho tiempo. P.ej: si se ha muerto un familiar, es normal estar triste un tiempo, en relación a la cercanía que teníamos con el mismo, pero no es normal estar triste durante 20 años después del fallecimiento.

Es cuando no nos permitimos sentir una emoción o no la sabemos gestionar en ese momento, cuando se puede bloquear en alguna zona del cuerpo y con el tiempo provocar en esa zona algún dolor y/o patología.

¿Qué debemos hacer para una correcta gestión de las emociones y no quedarnos bloqueadas en ellas?

1.      Ser consciente de la emoción que estamos sintiendo (qué es? Rabia? Culpa? Tristeza?...)

2.      Aceptar que nos sentimos así: muchas veces bloqueamos lo que sentimos porque es una emoción que no nos gusta, por ejemplo celos, envidia…

3.      Permitirnos sentir esa emoción, experimentarla, durante el tiempo que haga falta. Como hemos dicho antes, ninguna emoción es negativa y todas tienen su finalidad cuando aparecen.

Esta es la manera de fluir con las emociones y no bloquearlas. De esta manera evitaremos almacenarlas en alguna parte del cuerpo y sufrir dolores o patologías en estas zonas.

Irene Estébanez Aramendía

Fisioterapeuta Col.588 y Osteópata C.O.

C/Colón 22-2F (46004 Valencia)

Tel. 647947183

ireneestebanez@hotmail.com