Fisioterapia y Osteopatia

Fisioterapia y Osteopatia

lunes, 12 de febrero de 2018

CINTURÓN PÉLVICO





¿Qué es el cinturón pélvico y para qué sirve?


El cinturón pélvico es una cincha elástica y regulable que se puede utilizar para estabilizar la pelvis durante el embarazo y en el postparto.

Durante el embarazo puede ser útil si existen dolores lumbares, en la zona sacroilíaca o en el pubis, debidos bien por el aumento de peso y desplazamiento del centro de gravedad de la mujer o por la hiperlaxitud de las articulaciones de la pelvis provocada por la secreción de la hormona relaxina. También se aconseja en caso de pesadez, problemas circulatorios o debilidad del suelo pélvico.
Más adelante, en el postparto, es recomendable utilizarlo durante las 8 semanas siguientes para estabilizar la pelvis, cuyos ligamentos se han dado de sí para favorecer la cabida del bebé y más tarde el paso del mismo a través del canal del parto. Tanto si ha sido un parto natural como por cesárea, es recomendable el uso del cinturón, ya que en ambos casos la hormona relaxina ha estado presente durante el embarazo y lo estará hasta 8 semanas más tarde del parto.
En este período igualmente es útil para la musculatura del suelo pélvico, cuya recuperación será mejor si la pelvis está estable. Esto nos hará menos propensas a sufrir pérdidas de orina o debilidad en esta zona.
Es preferible el uso del cinturón al de la faja postparto, ya que ésta inmoviliza demasiado a la mujer y si es utilizada de manera prolongada, debilitará los músculos abdominales. Tenemos una faja abdominal en nuestro cuerpo y ésa es la que la mujer debe fortalecer para dar estabilidad! Pregunta a tu fisioterapeuta cómo puedes ir haciendo suaves ejercicios para fortalecer el músculo transverso en el postparto.



¿Cómo y en qué zona se coloca el cinturón?


El cinturón, que tiene unos 8 cms de ancho (bastante menos que una faja) se coloca durante el embarazo un poco por debajo de las espinas ilíacas anterosuperiores por delante y a nivel de las articulaciones sacroilíacas por detrás. De esta manera, la presión del cinturón no influirá negativamente al feto y nos ayudará a sobrellevar las consecuencias del aumento de peso durante el embarazo. Pregunta a tu médico o fisioterapeuta acerca de la colocación del mismo si no lo tienes claro.


En el caso del postparto, el cinturón se colocará igualmente por debajo de las espinas ilíacas anterosuperiores. Simplemente por el hecho de tratarse de un cinturón ancho y no de una faja, evitará que la musculatura del abdomen se debilite e igualmente favorecerá la reducción del tamaño de las caderas. Durante las 8 semanas siguientes al parto, se recomienda llevarlo en todo momento, tanto de día como de noche.
La presión con la que cerremos el cinturón no debe ser exagerada en ninguno de los dos casos. Debe permitir el movimiento fluido al caminar y no debe ser molesta para la madre. Se ha observado en estudios que una presión excesiva no aumenta la eficacia del cinturón.





Irene Estébanez Aramendía
Fisioterapeuta Col. 588 ICOFV y Osteópata C.O.
C/Colón, 22-2F (46004 Valencia)
Tlf: 963216750

No hay comentarios:

Publicar un comentario