La artrosis
de rodilla es una patología en la que se desgasta el cartílago de la rodilla. El
cartílago es una capa de tejido que rodea al hueso y actúa de amortiguador de
impactos.
La artrosis es
un proceso de envejecimiento normal de todas las articulaciones, que se da más
a menudo en las articulaciones que soportan carga. En la rodilla también es más
frecuente, ya que es el cruce de cadenas lesionales ascendentes que vienen del
pie y descendentes que vienen de las lumbares y pelvis.
Algunos de
los síntomas son dolor de rodilla al caminar, subir o bajar escaleras y
levantarse o sentarse de una silla. También se puede notar en ocasiones
hinchazón y calor en la articulación.
¿Qué medidas podemos
tomar para paliar el dolor?
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En
períodos de crisis, tomar antiinflamatorios y aplicar hielo en períodos de 10
minutos
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No
hacer movimientos o ejercicios que supongan una flexión máxima de la rodilla
(no más allá de unos 110º)
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Como
suplementos vitamínicos, los que aportan glucosamina han demostrado ser
efectivos a largo plazo
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Perder
peso en caso de que la persona padezca sobrepeso u obesidad
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Tratamiento
de fisioterapia con terapia manual para evitar la ingesta excesiva de fármacos
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Hacer
ejercicios suaves de tonificación de la musculatura de la rodilla (ver más
abajo)
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La
gimnasia dentro del agua es muy beneficiosa, ya que nos permite fortalecer la
rodilla sin cargar el peso sobre la articulación
¿Qué ejercicios podemos
hacer para mejorar la artrosis de rodilla?
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Caminar
dentro del agua, hacia delante y hacia atrás
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Subir
la rodilla hacia arriba, sin flexionarla más de 90 grados, también dentro del agua
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Bicicleta
dentro del agua subidos en un churro
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Contracciones
del cuádriceps con toalla enrollada debajo: series de 10 repeticiones. Mantener
la contracción durante 3-4 segundos.
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Sentados
en una silla, extender alternativamente una rodilla y otra, manteniendo la
pierna estirada y contraída durante 3-4 segundos.
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“Sentadillas”
sin movimiento: colocarse con la espalda apoyada en la pared, descalzo para no
resbalarse. Formar un ángulo con las rodillas de unos 120 grados, manteniendo
los pies más adelantados que las rodillas. Aguantar en esta posición unos 30
segundos. Hacer varias repeticiones.
En algunos
ejercicios se puede notar alguna molestia al realizarlos, esto puede ser normal.
Deberíamos suspenderlos si notamos que la realización de los mismos aumentan
anormalmente el dolor.
Irene Estébanez Aramendía
Fisioterapeuta Col.588 y Osteópata C.O.
C/Colón 22-2F (46004 Valencia)
Tel. 647947183
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