LA SOBRECARGA HEPÁTICA

En la vida que llevamos actualmente es frecuente la sobrecarga hepática, es decir, que sometemos a este órgano a un ritmo de trabajo mucho más alto que el que puede llevar. El hígado es responsable de muchas funciones vitales, entre muchas otras, la detoxificación del organismo y el metabolismo de los alimentos.

Que tengamos el hígado “sobrecargado” no significa que tengamos una patología de hígado. Gente aparentemente sana puede sufrir este trastorno.

¿Cuáles son las causas de la sobrecarga hepática?

-          Mala alimentación (dulces, grasas trans, hidratos de carbono refinados)

-          Contaminación ambiental y exposición a químicos

-          Ingesta de drogas, tóxicos, medicamentos

-          Estrés y emociones contenidas

-          Escaso descanso

¿Cómo sabemos si tenemos sobrecarga hepática? Podemos decir que la tenemos si presentamos 5 síntomas de los siguientes:

-          Dolor de cabeza

-          Malas digestiones

-          Dolor muscular y rigidez generalizada

-          Diarrea o estreñimiento

-          Cansancio sobre todo por las mañanas

-          Boca seca o halitosis por las mañanas

-          Caspa

-          Granos en la espalda o acné

-          Baja tolerancia al alcohol

-          Dolor en hígado, hombro derecho o escápula derecha

-          Petequias (arañas vasculares)

-          Mala circulación y/o edemas

-          Orina oscura por las mañanas

La sobrecarga hepática se ha relacionado con patologías como la fibromialgia, enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa, depresión, artritis reumatoide, etc…

 ¿Qué medidas podemos tomar para combatir la sobrecarga hepática?

-          Hacer ejercicio aeróbico intenso regularmente

-          Beber agua (2 litros) espaciados durante el día y fuera de las comidas

-          Descanso adecuado a nuestro ritmo de vida

¿Qué alimentos nos ayudan a limpiar el hígado?

-          Toda la familia de las coles: brócoli, coles de bruselas, repollo, coliflor.....

-          Alcachofa, cebolla, ajo, puerro

-          Frutas: manzana y pomelo

-          Alimentos ricos en omega 3: aceite vírgen extra de oliva o de lino, pescado azul (sardina, atún, boquerón, salmón, caballa…)

-          Infusión de cardo mariano

-          Alimentos a evitar: lácteos, azúcar, grasas trans y hidratos de carbono refinados (dulces, harinas blancas, pasta y pan blanco, bebidas azucaradas…)

-          Agua caliente con limón exprimido (sobre todo por las mañanas en ayunas)

-      También hay suplementos nutricionales o plantas que nos ayudan a limpiar el hígado: algunas de lelas son el omega 3, plantas como el desmodens, boldo, cardo mariano...

Irene Estébanez Aramendía

Fisioterapeuta col.588 y Osteópata C.O.

C/Colón 22-2F (46004 Valencia)

Tel. 647947183